La revolución tecnológica está transformando radicalmente el ámbito industrial con la llegada del Internet de las Cosas (IoT). Esta evolución ha fortalecido la conectividad y la colaboración entre dispositivos, inaugurando una era de eficiencia sin precedentes. El impacto de estas innovaciones ya se está sintiendo en diversas industrias. En este contexto, la adopción extendida de tecnologías de IoT, la explotación del potencial del 5G, la mayor flexibilidad en la producción, la integración de IA y los gemelos digitales, junto con los avances en ciberseguridad, están moldeando el panorama del IoT en 2024.
El IIoT (Industrial internet of things) se está adoptando en diversas industrias que van desde la electricidad hasta las cadenas de suministro. Algunos de estos sectores incluyen: atención médica, manufactura, petróleo y gas, vehículos autónomos, redes eléctricas inteligentes y aviación. Los dispositivos de esta categoría pueden ir desde diminutos sensores ambientales, localizadores hasta complejos robots industriales (como los cobots).
Su implementación ha proporcionado numerosos beneficios, como la mitigación de errores humanos, la optimización de costos en términos de tiempo y finanzas, la facilitación de decisiones rápidas y efectivas, y el fortalecimiento de la eficiencia general y las capacidades de mantenimiento.
Particularmente en el sector manufacturero, las tecnologías de IIoT se han utilizado para mejorar la eficiencia operativa, permitir el seguimiento preciso de la ubicación de herramientas, la gestión de inventarios y el mantenimiento predictivo con el objetivo de maximizar el tiempo de actividad y fortalecer la tolerancia a desastres.
En comparación con las redes convencionales como IoT, el paradigma de IIoT exhibe un nivel de sensibilidad elevado debido a su escala, complejidad, robustez y naturaleza crítica. Además, los desafíos de seguridad en IIoT, en comparación con IoT, varían significativamente en varias dimensiones, incluyendo superficie de ataque, conectividad, interoperabilidad e integración OT. Las redes convencionales principalmente incluyen elementos tradicionales de infraestructura de TI, como servidores, estaciones de trabajo, enrutadores y conmutadores, dentro de su superficie de ataque. En contraste, IIoT amplía la superficie de ataque al incorporar una amplia gama de dispositivos industriales, incluidos sistemas de control, sensores, actuadores, sistemas SCADA y dispositivos de campo, junto con protocolos de comunicación industrial.
Es justo ahí donde la ciberseguridad emerge como un punto focal a medida que la conectividad de IoT se expande. De hecho, se están realizando inversiones significativas en medidas de ciberseguridad robustas, incorporando IA para detectar y abordar posibles amenazas. Además, la tecnología blockchain está empezando a ser utilizada como solución para asegurar y autenticar datos, fomentando la colaboración entre fabricantes, expertos tecnológicos y profesionales de seguridad.
El análisis de datos y la IA se centran en el aprendizaje automático para garantizar la calidad y confiabilidad de los datos, mientras que el mantenimiento predictivo emerge como una estrategia para el análisis y respuesta de datos en tiempo real. Se espera que la adopción de tecnologías de comunicación NB-IoT/LTE-M aumente significativamente, desplazando tecnologías convencionales como 2G/GPRS y 3G debido a su bajo consumo de energía y cobertura extendida.
La seguridad y privacidad en el mundo del IIoT son fundamentales para preservar la integridad de los datos. Desafíos como la diversidad de dispositivos, la falta de estándares y recursos limitados requieren una gestión y monitoreo efectivos. Abordar estos desafíos es crucial para garantizar la solidez y confiabilidad de los sistemas lo que puede implicar la implementación de autenticación robusta, cifrado, actualizaciones regulares y gestión de parches para mitigar amenazas como ataques de denegación de servicio distribuido (DDoS), malware y canales de comunicación inseguros.
No cabe duda de que, la colaboración entre el gobierno y la industria es esencial para desarrollar estándares y pautas completas para un ecosistema de IoT seguro. En conclusión, a medida que el ecosistema de IoT se expande, comprender las implicaciones de seguridad e implementar medidas efectivas de ciberseguridad son imperativas para garantizar la seguridad y el éxito continuo de las tecnologías de IoT en diversas industrias alrededor del mundo.